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Bárbara Morí, Eduardo Santamaría, Jacqueline Bracamontes y Jan

23 DVDS

Rubí es una bella y carismática joven de clase trabajadora que estudia en una universidad gracias al gran esfuerzo de su hermana. Rubí es la mejor amiga de Maribel, una millonaria joven con un pequeño defecto en una pierna. Rubí eventualmente conoce a Héctor, novio de Maribel, y a su mejor amigo Alejandro. Pero una verdad más oscura se esconde dentro de Rubí. Se ve guiada por una oscura ambición que no la detiene hasta conseguir lo que quiere, y lo que quiere es escapar de la pobreza y ser millonaria.

Alejandro le ofrece amor verdadero pero nada de lujos debido a su clase media. Ella lo rechaza a pesar de creer que es realmente su verdadero amor. Rubí entonces seduce a Héctor, ya que es rico al igual que Maribel, así que en el día de su matrimonio con Maribel, ambos huyen dejando a Maribel sumida en la más profunda tristeza. Así, Rubí finalmente logra obtener el estilo de vida y el dinero que siempre soñó, pero pronto aprendería que el dinero no lo es todo.

Rubí comienza a extrañar a Alejandro y decide recuperarlo a como diera lugar, aún cuando Maribel y Alejandro han comenzado a salir. Alejandro pronto se encuentra en un dilema, entre Rubí y Maribel; Rubí se encuentra en un dilema entre el dinero y Alejandro. Rubí hará lo que sea para obtener lo que quiere, aunque fuera a las expensas de los demás o significara dañar a quien se cruce en su camino. En un momento, Rubí considera cambiar, pero termina volviendo a ser la villana. Incluso luego de que un adivino le dijera que debía cambiar o de lo contrario sería castigada por sus pecados, Rubí decide no darle importancia y sigue con su vida.

Finalmente, Alejandro va a verla una vez más para decirle que todo ha terminado y que ha elegido a Maribel. Luego de todos sus planes, mentiras y traiciones, Rubí le ruega no dejarla, llegando a un punto en el que pierde toda la dignidad y orgullo que le quedaba. Se arrodilla y abraza sus pierdas, rogándole no irse. Él es su verdadero amor y no se niega en dejarlo ir. Alejandro está harto de su forma de ser y decide marcharse. Al bajar las escaleras, Rubí lo sigue pero resbala y cae varios pisos abajo. En el hospital le amputan una pierna para salvar su vida.

Rubí no muere y en ningún momento se arrepiente de lo que ha hecho. Su hermana Cristina trata de animarla para que empiece una nueva vida, diferente a la que llevó hasta ahora. Todo lo que Rubí tenía se ha ido. Su millonario y joven esposo, Héctor, muere; él la amaba y la deseaba hasta el final. Los bienes que le dejó se terminaron, como también el dinero que aún tenía. Se atrasó en la renta y es detestada en su comunidad. Incluso su belleza ha desaparecido.

Rubí incluso se enemista con su mejor amiga, quien siempre estuvo de su lado y la ayudó, aún al final cuando se entera lo malvada que era realmente. Le pide al adivino que la visitara una vez más, y le dice que este era el resultado de todas sus acciones, era su castigo. La pasó muy mal mientras aceptaba la verdad. Ella quiere volver a ser como era antes, bonita y encantadora, pero todo lo que siempre tuvo ya no está. Sin embargo, nunca se arrepiente y no siente culpa. Hará un desesperado intento de matar a Alejando en su boda con Maribel, pero no lo consigue. Él es su verdadero amor y siempre lo amará.

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